Especificidad de la intervención
psicosocial e incidencia en la relación entre políticos y técnicos
Consideraremos ahora algunos rasgos de la intervención psicosocial (o de la
Psicología Comunitaria) que condicionan el estado de relativa indeterminación
de los dos papeles examinados, el del político y el del técnico, y su mutua
relación. Primero, la juventud del campo, que aún está discutiendo y perfilando
tanto su carácter, alcance y relación con ámbitos vecinos, como sus fines,
posibilidades y límites reales (lo que puede de hecho lograrse y lo que no).
También están en discusión las competencias y atribuciones de las distintas
instituciones o escalones profesionales (políticos, técnicos y administrativos)
y profesiones técnicas (psicólogos, psicopedagogos, asistentes sociales,
etcétera) implicados, y el papel de cada uno en una acción asumida como
multidisciplinar. Segundo, su rentabilidad social y electoral hacen que la
intervención social sea particularmente propensa a la explotación electoralissta
y a la utilización partidista, más o menos encubierta, del técnico. Tercero, el
campo se ocupa de los problemas "residuales" o efectos secundarios de
una forma de "desarrollo" económico y técnico que, como lógica
dominante de la vida social, no se está socialmente dispuesto a modificar. La
consecuencia es palmaria, un mandato social imposible: el interventor
psicosocial se enficenta a problemas crónicos y complejos cuya erradicación
requiere el cambio de una forma de producir, consumir, relacionarse y vivir.
Pero ese cambio no es realmente deseado por la sociedad ni por sus
representantes políticos. ¿El resultado? El parcheo, el remiendo y los cambios
parciales con efectos temporales y Herradicadosos que desalientan al
interventor y a la gente. El punto es que, suponiendo que la intervención
psicosocial tuviera una base científica apropiada -que en realidad no tiene-,
¿cómo podría el interventor desear la solución de una problemática que lo
dejaría sin trabajo? Esta es otra contradicción a considerar.
Introducción psicología comunitaria Maritza Montero
Introducción psicología comunitaria Maritza Montero • ¿Por qué no se desarrollaron formas de psicología comunitaria (entendida como una disciplina Sistemática, no como prácticas aisladas) en América latina antes de la década del setenta? Durante la década de los 50 la psicología comenzó a ser comprometida, militante y dirigida a los oprimidos. Hay que comprender que la psicología comunitaria no se desarrolla por que surge en la disconformidad de la psicología social donde predominaba el individualismo sin dar respuesta a los problemas sociales, grupales, comunitarios • ¿Qué instituciones sociales podrían haberse visto amenazadas por el desarrollo de una psicología comunitaria? ¿Cuáles se habrían visto fortalecidas Todo parece indicar que las instituciones no se sintieron amenazadas por el desarrollo de una psicología comunitaria, ya que muchas de ellas se han visto fortalecidas en áreas de la salud comunitaria, de la psicología ambiental comunitaria, de la psicología educ...
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